lunes, 9 de julio de 2018

Bistec, una nueva víctima de la "guerra de aranceles"


Un nuevo arancel fue impuesto cuando la importadora de carne, Suzhou Huadong, se encontraba pasando un cargamento a través de las aduanas de Shanghái.

BLOOMBERG NEWS@ElFinanciero_Mx
Sólo tres contenedores de productos pasaron la aduana antes de la aplicación de la medida arancelaria.Fuente: Bloomberg


Los aranceles de represalia por parte de China a los bienes de Estados Unidos se aplicaron cuando uno de sus mayores importadores de carne pasaba un cargamento procedente de California a través de las aduanas de Shanghái.
Ahora Suzhou Huadong Foods se ha quedado con una pila de bistec estadounidense a precios inasequibles.
Sólo tres contenedores de productos congelados, como costillas y lomo de cerdo, pasaron la aduana antes de que el nuevo arancel impusiera una tasa de hasta 500 mil yuanes (75 mil dólares) a cada una de las seis cajas restantes, según Gong Peng, director general del importador.

Suzhou Huadong se quedó con una pila de bistec a precios inasequibles.Bloomberg.

"No nos queda otra opción. Tenemos que asumir los costes", dijo Gong en una entrevista. "Tenemos que reducir drásticamente las compras de carne de los ganaderos estadounidenses".
Estados Unidos impuso un arancel del 25 por ciento a importaciones chinas de 34 mil millones de dólares, desencadenando lo que China ha llamado 'la mayor guerra comercial de la historia económica' el 6 de julio.
Beijing respondió de inmediato con aranceles a la soya, la carne y los vehículos estadounidenses. Suzhou Huadong, que suministra a supermercados como Sam’s Club de Walmart en China, es sólo una de las primeras víctimas.
Para los fabricantes de automóviles y de whisky, pasando por las empresas que integran la compleja cadena mundial de suministros que define la fabricación moderna, es un momento difícil, ya que tienen que lidiar con unos costes más altos y consecuencias de algunas de las decisiones comerciales anteriores.
La capacidad de las compañías afectadas por los aranceles para capear el conflicto puede depender en parte de la cantidad de productos que lograron importar antes de que entraran en vigor los aranceles. Pero una vez que esos suministros se agoten, tendrán que absorber las tarifas o pasarlas a los clientes.
Ford Motor y Tesla son dos ejemplos. Ambos fabricantes de automóviles anunciaron recortes de precios en China hace sólo unas semanas, facilitando el alcance a los consumidores de los sedanes Lincoln y Model S, después de que China bajase los aranceles a las importaciones de vehículos extranjeros al 15 por ciento.
A partir del 6 de julio, esos mismos modelos, si se fabrican en Estados Unidos, están sujetos a un impuesto del 40 por ciento.
Tesla elevó los precios del Modelo S y Modelo X en 150 mil yuanes a 250 mil yuanes después de las tarifas adicionales, de acuerdo con un comercial. Eso llevaría el precio minorista de un Modelo S a casi 1.47 millones de yuanes. Ford dijo que se abstendrá de subir los precios, al menos por ahora. El modelo de Lincoln Navigator de gama alta cuesta 1.16 millones de yuanes.
BMW y Daimler también se enfrentan a mayores costes porque importan modelos de lujo a China desde sus plantas de ensamblaje en Estados Unidos.
BMW dice que no podrá absorber las tasas más altas totalmente y está calculando los aumentos de precios necesarios. Daimler rehusó comentar más allá de decir que quiere ofrecer condiciones competitivas a los compradores.