Este instrumento ayudaría a evaluar de
manera previa las implicaciones ambientales de proyectos de obras y actividades
en los planes y programas gubernamentales, y determinar si se pueden llevar a
cabo; Su aprobación sería un primer paso para avanzar hacia una revisión
integral de todo el Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental (PEIA).
Organizaciones de la sociedad civil que
trabajan por la defensa del medio ambiente consideran muy positiva la
iniciativa presentada en el Senado de la República para incluir la Evaluación
Ambiental Estratégica (EAE) como un instrumento de la política ambiental, pues
ello permitiría evaluar de manera previa los proyectos de obras y actividades
en los planes y programas gubernamentales que pudieran provocar impactos ambientales
significativos o graves, y determinar si se pueden llevar a cabo.
El pasado 18 de septiembre se publicó en la
Gaceta Parlamentaria del Senado de la República la iniciativa que reforma y
adiciona diversas disposiciones de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la
Protección al Ambiente (LGEEPA), la cual tiene por objeto incluir a la
Evaluación Ambiental Estratégica dentro de los instrumentos de la política
ambiental, siendo turnada a las Comisiones de Medio Ambiente y Recursos
Naturales y de Estudios Legislativos[1].
Cabe destacar que dicha iniciativa toma
como base la segunda propuesta del documento titulado Propuestas de
Reformas y Adiciones a la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección
al Ambiente para mejorar el Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental
Federal en México, el cual fue elaborado por las organizaciones Alcosta Alianza
para la Sustentabilidad del Noroeste Costero, A. C.; Causa Natura, A. C.;
Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. (Cemda); Defensa Ambiental del
Noroeste, A. C. (DAN); Fundar, Centro de Análisis e Investigación y Vo.Bo.
Asesores Integrales, S.C.
La Evaluación de Impacto Ambiental (EIA)[2] es
un procedimiento administrativo a través del cual, la autoridad competente
evalúa de manera previa los proyectos de obras y actividades que pudieran
provocar impactos ambientales significativos o graves. Con base en ella
determina si autoriza, condiciona o niega su realización. Sin embargo, hoy en
día la EIA presenta una serie de deficiencias y limitaciones que afectan la
aplicación del instrumento, así como el cumplimiento de su objeto. Una de dichas
deficiencias es la inexistencia de un procedimiento de evaluación de las
implicaciones ambientales de los planes y programas gubernamentales,
generalmente conocida como Evaluación Ambiental Estratégica (EAE), la cual
evitaría que se tuvieran que resolver en lo individual las EIA de todas las
obras o actividades correspondientes; situación que tiene saturado al
instrumento.
Entre los puntos relevantes que se
contemplan en la mencionada Iniciativa, destacan los siguientes:
1.- Al tratarse de un instrumento que evalúa
los posibles impactos ambientales desde la formulación y actualización de los
programas de la Administración Pública Federal, quita presión a la Evaluación
del Impacto Ambiental que se lleva a cabo para cada proyecto de obra o
actividad;
2.-Faculta a los tres órdenes de gobierno para
llevar a cabo la EAE de los programas de su competencia;
3.- Se exceptúa de la EAE a los programas en
materia de seguridad nacional y defensa nacional;
4.- Cuando la dependencia o entidad promotora
del proyecto no se ajuste al dictamen preliminar emitido por la Secretaría de
Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), dicho proyecto deberá ser
sometido a un Comité de EAE, integrado, entre otros, por representantes de
instituciones académicas o científicas, organizaciones sociales y del sector
empresarial; y
5.- Prevé mecanismos para la publicitación y
difusión de los proyectos de programas y su proceso de EAE, así como la
realización de foros de consulta en los que los promoventes expliquen los
posibles impactos negativos sobre el ambiente y las medidas que se adoptarán
para prevenirlos, mitigarlos o, en su caso, restaurarlos o compensarlos.
La discusión y aprobación de esta
iniciativa por parte de las Comisiones de Medio Ambiente y Recursos Naturales y
de Estudios Legislativos, así como por el pleno del Senado de la República
constituiría un paso adelante para contribuir a reducir los impactos negativos
que las obras y proyectos gubernamentales ocasionan en contra de los
ecosistemas naturales. De igual forma, las organizaciones reiteraron que es
urgente ir más allá y llevar a cabo una revisión integral de todo el
Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental (PEIA), toda vez es un
instrumento que actualmente resulta insuficiente para prevenir y mitigar las
afectaciones que el desarrollo está ocasionando al medio ambiente.