Muy enojada se encuentra la gente que
usa la carretera Insurgentes-Puerto López Mateos, con el diputado Celestino
Rangel Moreno, quien juró y perjuró que los trabajos de reparación ya habían
iniciado, por lo que consideró un logro su gestión.
Nos cuentan que lo único que hicieron
es tapar dos o tres baches, para la foto y, ahí la dejaron.
La carretera se encuentra
prácticamente destruida, en tanto que el cínico diputado Celestino Rangel,
sigue cobrando muy campante sus dietas, con sus respectivas sábanas de boletos
canjeables por gasolina.