Retrato de
John Allen Chau, que fue asesinado por la tribu de los sentinelenses (Twitter).
Piden no
recuperar cuerpo de John Allen Chau, turista estadounidense que fue asesinado por
tribu que lleva 60 mil años aislada del mundo.
Tras su
asesinato por parte de miembros de una misteriosa tribu que vive en la isla
North Sentinel, en el océano Índico, miembros de la ONG Survival International,
pidieron a las autoridades locales abandonar sus intentos de recuperar su
cadáver.
Esto porque
los sentinelenses, un grupo de hombres y mujeres de todas las edades que aún
conservan la forma de vida de nuestros ancestros del periodo neolítico, podrían
atacar a los rescatistas que intenten entrar a la isla en la que han vivido por
60 mil años para recuperar el cuerpo.
La ONG
calificó los intentos de rescate como “increíblemente peligrosos” tanto para la
tribu como para los rescatistas.
Los
sentinelenses han sido considerados como parte de una de las etnias más
herméticas del mundo debido al rechazo contundente que sienten hacia el resto
de los humanos.
La mañana
del 17 de noviembre, un grupo de pescadores vio que los sentinelenses estaban
enterrando el cuerpo que, por su vestimenta, parecía ser el de John Allen Chau.
Desde entonces, autoridades de la India han intentado recuperar su cadáver.
A lo largo
de las últimas décadas, varias personas que han intentado hacer contacto con
ellos fueron atacadas por flechas que los sentineleses dispararon con sus
primitivos arcos, así como con lanzas.
John Allen
Chau, de 27 años de edad, fue el último “occidental” en intentar acercarse a
los sentinelenses quienes, al verlo, comenzaron a dispararle flechas hasta
matarlo.
Esta tribu
no ha descubierto el fuego e incluso se cree que hablan una lengua que se
perdió hace miles de años, por lo que se considera que son los últimos
guardianes de las primeras formas orales de comunicación de la Humanidad.
Hace varias
décadas, las autoridades locales establecieron un cerco de seguridad alrededor
de la isla, ya que el contacto con esta tribu podría provocar su desaparición,
ya que sus miembros llevan tanto tiempo alejados del resto del mundo, que no
cuentan con defensas contra enfermedades tan comunes como la gripe o el sarampión.
El contacto
con gente del exterior podría significar el fin de los sentinelenses.