Vaya qué a sus malquerientes, pero
sobre todo a sus opositores políticos, les causa escozor el más mínimo
movimiento que hace el alcalde de La Paz, Rubén Muñoz Álvarez, quien cada
semana nos sorprende con acciones cada vez más interesantes y encaminadas a
poner a nuestra ciudad capital como una de las mejores.
Esta semana le pegó una desempolvada
a las huellas de corrupción dejadas por su antecesor Armando Martínez Vega, que
fue turnado a la FGR.
A la par, apareció en una entrevista
en el plano nacional con el ameritado periodista Sergio Sarmiento.
No sabemos si fue el llevar ante la
justicia a Martínez Vega por los actos de corrupción cometidos en su
administración o por moverse en los primeros planos nacionales, lo que puso en
actividad a un pequeño ejército de “bots” para arremeter contra Rubén Muñoz.
Pero de que el alcalde de La Paz los
pone inquietos, a políticos y malquerientes, es un hecho.