lunes, 11 de mayo de 2020

Quieren Colapsar al Ayuntamiento de La Paz




Hay gente que por ignorancia, o por revanchismo político, o por ser sistemáticamente contreras, parece que les daría mucho gusto que colapsara el Ayuntamiento de La Paz, todo con tal de ver fracasar al alcalde morenista Rubén Muñoz Álvarez.

La sola idea de que se ofrezcan en venta algunos terrenos del Ayuntamiento, desató una campaña mediática con la participación incluso de sedicentes periodistas que rayan en lo irresponsable, encaminada ésta a frenar una eventual acción de compraventa.
Se necesita ser ignorante o formar parte de intereses perversos para boicotear al Ayuntamiento en aras de lograr el colapso. Ya lo han hecho Maximino Iglesias y Francisco Frías en repetidas ocasiones, prestando servicios a intereses políticos.
El Ayuntamiento de La Paz se encuentra en una difícil situación económica, que con los efectos de la pandemia, lo pondría en relativamente corto tiempo, al borde de la quiebra y con el consabido colapso en la prestación de servicios públicos primordiales como recolección de basura y alumbrado público.
Tan solo la nómina es una pesada carga.
Alcaldes y alcaldesas se encargaron, a su paso por la administración, de hacer del Ayuntamiento un monstruo burocrático, no obstante sus discursos de aligerar la nómina.
Rubén Muñoz y los regidores del actual Ayuntamiento no escapan de esa irresponsabilidad en la que incurrieron sus antecesores, de meter a la burocracia municipal a cuanto pariente, amigo, compadre, ahijados y compromisos políticos se les atravesaron.
Una gran parte de esa gente que meten influyentes, son aviadores, personas que cobran un sueldo sin tener una función específica, incluso sin presentarse a trabajar.
Pero con toda esa bola burocrática y de aviadores, el Ayuntamiento se enfrenta a la falta de ingresos para sostener sus necesidades.
Vamos, hay un problema y se tiene que resolver de inmediato, pues con ello va en juego la prestación de los servicios.
En un principio se habló de la contratación de un crédito, que no se ha concretado porque los bancos no le quieren prestar en estos momentos.
La única opción viable parece ser la enajenación de algún predio, siempre y cuando haya en tiempos del coronavirus alguien que esté dispuesto a pagar el precio real, que no se vaya muy abajo en la oferta.