Se ajustará a la “Guía de continuidad para garantizar los
servicios en las unidades médicas de la Administración Pública Federal en la
Nueva Normalidad”; Es un proceso que debe cuidar la salud de los trabajadores y
de los propios pacientes, no el final de la reconversión: Zoé Robledo; El
COVID-19 no nos ha ganado para la atención de otros padecimientos crónicos:
doctor Víctor Hugo Borja; Es fundamental que los derechohabientes acudan a las
unidades médicas en un ambiente seguro: doctor Raúl Peña Viveros.
Ciudad de México.- El Instituto Mexicano del Seguro Social
(IMSS) presentó su plan institucional para dar continuidad a los servicios
médicos, el cual se basa en tres ejes: seguridad de instalaciones, recuperación
de áreas de trabajo y reorganización en la operación de los servicios que
fueron suspendidos por la pandemia de COVID-19, de acuerdo con la “Guía de
continuidad para garantizar los servicios en las unidades médicas de la
Administración Pública Federal en la Nueva Normalidad”.
En este sentido, el director general del Instituto, Maestro
Zoé Robledo, señaló que esta guía no debe entenderse como el final de la reconversión,
“es un proceso que debe cuidar la salud de los trabajadores y también de los
propios pacientes”.
En conferencia de prensa y acompañado por directivos del
área médica, señaló que para atender la emergencia sanitaria el Instituto llevó
a cabo una reconversión histórica al disponer de una cantidad enorme de
recursos humanos, financieros, técnicos, físicos y de infraestructura.
Zoé Robledo indicó que conforme disminuya el número de
contagios confirmados y la demanda por una cama de hospitalización, se
regresará a la normalidad en los hospitales.
Afirmó que se ha logrado el objetivo de garantizarle a los mexicanos
una cama de hospital, atención o el uso de un ventilador cuando lo requieran, y
eso se refleja en que no se han saturado los hospitales del país que el IMSS
dispuso.
En su oportunidad, el director de Prestaciones Médicas,
doctor Víctor Hugo Borja, comentó que la reconversión del Seguro Social
significó destinar 16 mil 074 camas para pacientes COVID en la etapa donde más
se necesitó, además de 4 mil 645 ventiladores y la integración de 2 mil 535
equipos de respuesta, que se traducen en 40 mil 491 médicos y enfermeras a
cargo de estos pacientes.
Agregó que “los recursos humanos que se dedicaron a la
atención de los pacientes con sospecha de COVID fueron más de 60 mil, pero contratamos
adicionalmente para la atención de esta pandemia a 20 mil 868 trabajadores de
la salud entre médicos y enfermeras”.
El doctor Borja detalló que desde el inicio de la epidemia,
se dotó de Equipos de Protección Personal (EPP) a las y los trabajadores del
IMSS, a quienes se han entregado más de 30 millones de respiradores N95, KN95 o
N99; más de 35 millones de cubrebocas triple capa; 1.8 millones de caretas;
casi dos millones 600 mil goggles; más de 27 millones de guantes; 24 millones
de batas y tres millones de overoles.
En la comparación de servicios otorgados entre enero y
agosto de 2019 y 2020, indicó que se redujeron el número de consultas de
medicina familiar, de urgencias y especialidad, además de las
hospitalizaciones, cirugías, recetar, cesáreas, partos y estudios de análisis
clínicos. En tanto, el otorgamiento de recetas resurtibles incrementó en 372
por ciento.
Aseguró que con las acciones realizadas por el Seguro Social
“no nos ha ganado el COVID para la atención del resto de la población y por eso
queremos urgentemente regresar a atender estos otros padecimientos crónicos,
cardiovasculares y metabólicos; los pacientes de cáncer siguieron su
tratamiento, y el 80 a 85 por ciento de las consultas de los derechohabientes
del IMSS que se dan en el primer nivel de medicina familiar, se mantuvieron”.
Por su parte, el coordinador de Atención Integral en Segundo
Nivel, doctor Raúl Peña Viveros señaló que “es fundamental que nuestros
derechohabientes cuando se presenten a las unidades médicas, se presenten en un
ambiente seguro, de ahí que la estrategia que se refiere a seguridad a las
instalaciones”.
Esto en Campeche, Chiapas, Chihuahua, Guerrero, Morelos,
Oaxaca, Quintana Roo, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Tlaxcala, Veracruz Norte y
Veracruz Sur.
Indicó que a partir del primero de septiembre, se ha
empezado a recuperar los servicios que fueron diferidos al brindar más de 20
mil consultas de especialidades, más de 2 mil cirugías que regularmente no se
estaban realizando en el momento de atención máxima COVID; más de 120 mil
estudios de diagnóstico.
Dijo que ha hay servicios que no se han suspendido, en el
semáforo rojo se está trabajando con la extrema seguridad en situaciones de
urgencia y con personas que padecen COVID. “Medicina Familiar es un ejemplo
donde no hemos suspendido los servicios, en términos generales, para que la
población derechohabiente pueda tener acceso a sus propias necesidades”.
En cuanto a reorganización operativa, el doctor Peña Viveros
indicó que es sumamente importante utilizar toda la capacidad institucional
para poder recuperar lo más rápido posible los servicios.
Comentó que en hospitales de segundo y tercer nivel se
contará con servicios COVID y no COVID, urgencias respiratorias, consulta en
horarios no habituales, jornadas especiales quirúrgicas, estudios de
laboratorio y radiodiagnóstico en fines de semana.
Durante la conferencia de prensa, se guardó un minuto de
silencio en memoria de las personas que perdieron la vida a causa del COVID-19,
y del mismo modo, se brindó un minuto de aplausos en reconocimiento al personal
médico que hace frente a esta pandemia.
Estuvieron presentes en la rueda de prensa los doctores Juan Manuel Lira
Romero, Titular de la Unidad de Atención Médica; el doctor Manuel Cervantes
Ocampo, Coordinador de Atención Integral a la Salud en Primer Nivel; y el
doctor Efraín Arizmendi Uribe, Coordinador de Unidades Médicas de Alta
Especialidad.