Felipe Garrido
Digital
Trends.- Una investigación científica realizada por expertos de la
Facultad de Medicina del Trinity College de Dublín ha indagado en la relación
de la vitamina D con el COVID-19.
Valiéndose de una investigación sobre el envejecimiento
desarrollada en el mismo país, el estudio publicado en el Irish Medical Journal asoció
la tasa de mortalidad de enfermos por coronavirus y la falta del compuesto en
el cuerpo.
Los autores también indagaron en todas las investigaciones
previas hechas en otras localidades de Europa con respecto a la vitamina D. Con esos datos sobre la mesa, los expertos
compararon los niveles del compuesto en personas durante la década de los 90 y
en la actualidad.
Los resultados obtenidos arrojaron que en los países donde
se han producido más muertes por el SARS-CoV-2 existía en la mayoría de
pacientes baja presencia de este compuesto. En general, en países de latitudes
más bajas, como Italia y España, hay deficiencia de la vitamina.
En cambio, todas las naciones ubicadas al norte de Europa,
como Noruega, Finlandia y Suecia, han arrojado niveles más altos del compuesto
en sus pacientes enfermos por COVID-19.
“En el Reino Unido, los organismos de salud pública han
estado revisando constantemente las recomendaciones desde el comienzo del brote
de COVID-19. Una de ellas establece que todos los adultos deben tomar al menos
400 UI de vitamina D al día. Existe una fuerte evidencia entre asociaciones del
compuesto y la gravedad en pacientes”, explicó la profesora Rose Anne Kenny,
una de las autoras del estudio.
La vitamina D es un compuesto esencial para el sistema
inmune. Generalmente, el cuerpo la produce gracias a los rayos solares, la
aloja en el hígado y pasa por el riñón y el intestino, donde se transforma en una
hormona que potencia la creación de calcio.
Nuevas evidencias
Una segunda investigación efectuada en Inglaterra buscó
determinar si los niveles de vitamina D en la sangre están asociados con el
número de casos y la mortalidad por COVID-19.
Petre Cristian Ilie (Hospital Reina Isabel de King’s Lynn),
Simina Stefanescu (Universidad de Anglia del Este) y Lee Smith (Universidad
Anglia Ruskin) compararon los niveles medios de la sustancia en 20 países de
Europa junto con el número de casos fatales por cada millón de personas.
“Los resultados mostraron que los bajos niveles promedio de
vitamina D en un país están asociados con un número relativamente alto de casos
de COVID-19 y muertes registradas”, informó Research
Square.
Limitado a casos identificados a partir del 20 de marzo, se
trata de un análisis transversal que no evalúa los niveles de vitamina D
específicamente en individuos infectados, aclaró la publicación.
“Además, el número de pruebas de SARS-CoV-2 realizadas sigue
siendo limitado en muchas áreas. Sin embargo, los datos sugieren que los
niveles más altos de vitamina D pueden tener un efecto protector contra el
COVID-19”, puntualizó.
Según complementó Research Square, la vitamina D es un
nutriente que se encuentra en el pescado, el queso y los huevos, entre otros
alimentos. Su déficit en el organismo también se ha relacionado con un mayor
riesgo de diversas enfermedades, como tuberculosis, VIH, infecciones fúngicas y
sepsis.
Finalmente, los investigadores lamentaron que el grupo de
población más vulnerable al COVID-19, es decir los adultos mayores, también sea
el que tiene los menores niveles de vitamina D.