Por Antimio Cruz
No cualquier cirujano puede hacer este tipo de cirugía,
señala Nelson Rodríguez, presidente de la CMOCEM. En los últimos 10 años han
aumentado estas operaciones.
La cirugía contra la obesidad sólo podrá ser realizada en
México por médicos con dos especialidades.
En México, las cirugías para atender problemas de obesidad
sólo podrán ser realizadas por médicos que tengan doble certificación; como
cirujanos y como cirujanos bariatras, de acuerdo con la nueva modificación a la
Norma Oficial Mexicana SSA3-2017, para el tratamiento integral del sobrepeso y
la obesidad, que establece nuevas reglas para que se realicen de manera
confiable y segura este tipo de procedimientos.
Esta es la tercera versión de la norma oficial contra
obesidad, desde que fue emitida la primera, en 1998, y por primera vez se
incluye un apartado específico sobre cirugías y los profesionales que las
pueden realizar.
El Colegio Mexicano de Cirugía para la Obesidad y
Enfermedades Metabólicas (CMOCEM), que agrupa a 500 profesionistas de toda la
república dedicados a operaciones de pacientes con obesidad, apoyó los cambios
a la norma, pero indicó que todavía queda pendiente que se reconozca de manera
más clara a la cirugía como una opción de tratamiento para este problema de
salud pública, puesto que actualmente la mayoría de los hospitales públicos no
realizan este tipo de procedimientos.
En entrevista con Crónica, su presidente, Nelson
Rodríguez, dijo que hay un gran avance en el marco regulatorio, para aclarar
que no cualquier cirujano puede hacer una cirugía contra la obesidad, pero
indicó que todavía hace falta que las instituciones de salud públicas
reconozcan a este tipo de operaciones como una opción terapéutica pues es ahí
donde se atiende a la mayoría de las personas con bajos recursos
económicos.
“Este tipo de procedimientos se realiza en México desde hace
más de 25 años, pero en los últimos 10 años han experimentado un crecimiento
muy grande en número de operaciones y, aunque al principio se realizaban con
más frecuencia en los hospitales de los estados del norte del país, hoy se
practican en casi todos los estados”, dijo el doctor Rodríguez, poco antes de
decir que uno de los pioneros y grandes impulsores de la cirugía bariátrica en
el país fue el doctor Rafael Álvarez Cordero.
CANDIDATOS A CIRUGÍA. De acuerdo con la Encuesta
Nacional de Salud y Nutrición de Medio Camino 2016, en México existen 55
millones de adultos que padecen sobrepeso u obesidad, siendo esta última un
factor de riesgo para desarrollar comorbilidades como diabetes tipo 2,
hipertensión y dislipidemias, enfermedades que generan una alta carga clínica y
económica para el individuo y la sociedad.
En 2008 el sector salud gastó 67 mil millones de pesos en el
tratamiento de la obesidad y se estima que en 2017 este gasto fluctuó entre 151
mil y 202 mil millones de pesos.
En este grupo de personas con obesidad, existe un conjunto
de hombres y mujeres que tienen mucho más peso que el resto y a quienes se
clasifica como pacientes con obesidad mórbida. Actualmente se ha mostrado que
el tratamiento de un paciente con obesidad mórbida es 30 por ciento más costoso
que el de un paciente con peso normal.
“Estas personas pueden ser tratadas por medio de cirugía y
ahora la Norma Oficial reconoce que deben ser tratados por cirujanos de alta
especialidad. Desde 2010 el CMOCEM cuenta con 14 centros de educación de
cirujanos en la Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Tijuana, cuyo
objetivo es evitar los riesgos a los que puede quedar expuesto un paciente con
obesidad que se somete a una operación”, explicó Nelson Rodríguez.
“El marco regulatorio sigue avanzando, pero todavía falta
que se reconozca a este tipo de procedimientos como una alternativa de
tratamiento en programas públicos contra la obesidad, sólo así se podría practicar
en todas las instituciones del país. También faltan algunas regulaciones y
políticas para mejorar las condiciones de trabajo de los médicos residentes
especializados en cirugía bariátrica”, dijo el presidente del CMOCEM.