La industria de activos virtuales
crece más rápido que la estandarización de procesos para su regulación. Se
necesita un marco normativo ante el protagonismo que tendrán los activos
virtuales en el futuro de las economías.
Por Ana
Karen García
Miami,
Florida.- La ausencia de un marco estandarizado para el uso de criptoactivos
puede significar una problemática severa en la regulación y su cumplimiento,
coincidieron expertos en criptoactivos congregados esta semana en la AML
Compliance Conference 2019. La alerta empató con la publicación de una
normativa del banco central mexicano (Banxico) que metió freno al uso de
activos virtuales o criptoactivos en el sistema financiero regulado
del país.
México se
encuentra a la vanguardia en materia de regulación financiera con la
promulgación de la llamada Ley Fintech para regular a los actores
financieros de base tecnológica, dijo Sergio Álvarez, director del Comité de
Asuntos Legales de FIBA, la Asociación Internacional de Banqueros de
Florida (Florida International Bankers Association) y organizadora de la
conferencia.
La
limitación que impone la Circular 4/2019 de Banxico, publicada el 8 de marzo, puede
significar un obstáculo para la innovación y el cumplimiento regulatorio, pues
restringe el uso de criptoactivos entre las instituciones financieras y de
crédito y aleja la posibilidad de estandarizar normas.
Para los
expertos congregados por FIBA, es indispensable contar con un marco normativo
para los criptoactivos, como bitcoin o ethereum u otras monedas virtuales,
especialmente en una industria donde no existe entre los actores privados una
cultura sólida de combate al lavado de dinero o contra operaciones
fraudulentas. En su ADN, dijo Álvarez, la prioridad es crecer a cualquier
precio.
Es
importante que el uso de activos digitales no le gane la carrera a la
regulación. Hasta ahora el crecimiento de la industria va a un ritmo más
acelerado que la cooperación multinacional y multidisciplinaria para regularla,
advirtieron Jeff Horowitz, jefe de cumplimiento de Coinbase, y Carole
House, especialista en políticas de ciberseguridad de la Red de Combate a los
Delitos Financieros del Gobierno estadounidense (FinCEN).
Aun con las
deficiencias que pueda o no tener el marco de regulación mexicano para las
fintech (compañías de tecnología financiera, por su acrónimo en inglés) es
destacable que ya se haya creado una normativa para sus operaciones. Todavía
queda el plazo que se dio de 65 días después de la publicación del Banxico para
recibir comentarios y, de ser pertinente, hacer modificaciones a la Circular
4/2019.
Las tendencias internacionales
Las
problemáticas que surgen del uso de criptoactivos son, por un lado, cuestiones
de jurisdicción múltiple y, por otro, una ausencia de un marco estandarizado de
regulación, dijo David Schwartz, presidente y CEO de FIBA.
Estar a la
vanguardia con la regulación y el cumplimiento de activos digitales no sólo es
necesario, pues serán protagonistas en el futuro de las economías,
especialmente en el sector financiero, sino porque en algunos mercados ya se
utilizan para la compra de bienes de consumo.
Schwartz
resaltó el caso de Venezuela, donde muchos habitantes reciben transferencias de
criptomonedas desde distintas partes del mundo, cuyo valor permite que obtengan
bienes básicos y ésta se ha convertido en una de las formas de hacer frente a
la crisis en su país.
Así como el
uso de los criptoactivos sigue una tendencia creciente, su operación fuera de
los sistemas institucionales crece también aumentando las oportunidades de que
se realicen actos ilícitos a través de ellos, dijo Schwartz.
La
problemática, según los especialistas, continúa siendo la ausencia de
parámetros estandarizados, porque todavía son muy pocos los países con avances
en tema de cumplimiento regulatorio para medios virtuales y en algunos, como el
caso de México, enfrentan todavía problemáticas.
Las
relaciones entre el lavado de dinero o financiamiento al terrorismo y el uso
transfronterizo de criptoactivos se intensifican y cada vez son más difíciles
de detectar. Mientras no se estandaricen las normativas entre las iniciativas
públicas y privadas entre países, advirtió Schwartz, no se logrará avanzar en
materia.