De Tito Herrera
(Primera
parte)
Mis
respetables amigas y amigos; en atención a una pregunta de Cynthia Acosta y a
una opinión de Mario Meave; sobre como aprendí a brincar garrocha y a correr
los 100 metros planos.
Esto sucedió
cuando entre a estudiar, Hummmm.
En la
secundaria de gratos recuerdos Antonio Mijares, de San José del Cabo, que era
la única secundaria que había en la parte Sur dé nuestro Territorio. Por
primera vez tratare de contarla, tal y como fue; había platicado con mi
familia: mis papás, esposa, hijos y nietos, parte de mi historia como jugador
de basketbol, deportista y atleta; pero nunca la había escrito; así, que es una
primicia, jajaja; y anoche que estaba viendo en la televisión, la competencia internacional
💎Bruselas 2018, me motivó a contarles cómo empezó mi
afición a brincar garrocha y como se afianzó mi instinto por correr, yo en el
rancho, correteaba becerros, chivos y les agarraba la cola a los toretes, vacas
y toros y me llevaban casi esquiando y cuando ya no me daban las piernas, les
soltaba la cola y a veces me sambutían de narices en los matorrales y choyas,
pero me valía madre; me gustaba correr desde muy niño.
Como la
historia es larga; hummm, la contaré en 2 partes: Cuando me fui a estudiar a la
secundaria, los que estuvieron conmigo, van a decir, si, como no, jaja; tenía
12 años, 10 meses en septiembre de 1964: Una vez vi que varias palomilla
andaban brincando garrocha, que era una vara de bambú, de unos 3 metros de
largo y pesaría, unos 6 o 7 kilos; de los que recuerdo, uno era Alben Agundez,
muy bueno para brincar, correr y jugar Basketbol; ya estaban en tercer
grado, a mí, se me hizo fácil brincar, ya que ellos brincaban bastante alto,
con mucha facilidad; cuando ellos terminaron de brincar, yo agarré la garrocha
y puse la barra, que era de una madera delgada, como a 1.15 metros de
altura, trate de brincarla como unas 10 veces y no pude, eso me desanimó. Pasaron
como 3 semanas y no me dio por volver a intentar brincar, pero un día estando
en mi salón de clases, vi por la ventana, los dos postes de madera donde ponían
la barra y sentí como que algo se me movió internamente y me vi brincando y
experimente una sensación muy bonita, que hasta el día de hoy, la recuerdo y
vuelvo a sentir lo que sentí, hace ya 55 años, es algo indescriptible, eso me
motivó a intentar nuevamente a brincar garrocha; esa tarde me fui solo a la
secundaria y puse la barra a un metro y al primer brinco la pase, sentí una gran alegría, la subí a 1.15 y la
volví a brincar, la subí a 1.30 y la
brinqué sin dificultad; la puse a 1.50 y la tumbe, volví a intentarlo y la
brinqué, la subí a 1.60 y la tumbe 2 veces y a la tercera la brinque, la
puse a 1.70 y la tumbe las tres veces, pero me valió madres; porque ya sabía
brincar. Casi lloré de felicidad, esa
noche casi no dormí de la emoción que sentía. Hoy veo que caen en unos
colchones, que cuando caes, hasta te avientan para arriba. Nosotros caíamos en
tierra removida con una pala y pico, ( dijo "El Lulo " ) revuelta con
aserrín, al otro día laaargo se me hizo que no salíamos del salón, para ir a
brincar nuevamente, puse la barra a 1.60 y la brinque sin problema, la puse a
1.70 y la pase limpiamente. La alegría que experimenté fue indescriptible, la
puse a 1.75 y la tumbe 2 veces y a la tercera la brinque; al tercer día brinque
1.85.
Seguí
brincando y progresando; en marzo de 1965, fruíamos a competir a los
territoriales a Santa Rosalía; por cierto nos fuimos en una fragata y hubo un
mareadero de poca mad..... yo iba compitiendo en 100 metros planos, saltó con
garrocha y en la selección de básketbol; en la categoría Infantil
"C", en aquel entonces, había una tabla que sumaban, año de
nacimiento, estatura y peso y así se sacaba la categoría en la que competías;
creo hoy se toma únicamente el año de nacimiento, yo creo que por mi estatura ( 1.75) iba
compitiendo en esa categoría, porque la mayoría de los corredores de 100
metros, ya tenían bigotes; en 100 metros no califique, había un corredor,
creo que de Santa Rosalía, que le decían “El Cachora" y él fue quien
ganó la prueba; en salto con garrocha íbamos compitiendo Raúl Rodríguez y yo;
Raúl ganó el primer lugar y yo el segundo; yo brinqué 2.45 y creo Raúl brincó
2.55:
Seguí
entrenando 100 metros y salto con garrocha; en el año de 1966 fuimos a los
territoriales a la ciudad de La Paz, yo compitiendo en 100 metros, salto con
garrocha y relevos de 4X100; ya no iba compitiendo en básketbol, porque el
profe Fernandito Cota, me dijo que era riesgoso que me podía lesionar jugando y
eso me impediría competir en las pruebas de campo; competían delegaciones de
todo el territorio, desde Guerrero Negro, a San José del Cabo, el día de las
eliminatorias en 100 metros, gane mi pit, eliminatorio y al otro día era la
final; ese mismo día tenía la final de 100 metros. Salto de garrocha y
relevos de 4X100.
Al otro día, como a las 9.30 nos llaman a los
competidores de salto con garrocha; que por cierto, yo buscaba la garrocha de
bambú y no la veía; miraba un tubo largo que relumbraba tirado en el suelo y le
preguntó al juez ¿Dónde está la garrocha de bambú? y me contesta, allí está,
señalando el tubo relumbroso; era una garrocha de aluminio que en mi vida me
hubiera imaginado; la agarro y se me hace muy livianita, como si no trajera
nada en las manos. Yo estaba acostumbrado a la vara de bambú, que como ya les
dije, pesaba cerca de 8 kilos y con la cual brincaba de 15 a 20 veces al día;
desconfiado, voy con el profe Fernandito , que estaba haciendo sus tiros de
calentamiento de martillo y que por cierto ganó el primer lugar y le digo:
profe dice el juez que vamos a brincar con una garrocha, que dice que es de
aluminio y para mí, que está muy livianita, ¿no se irá a quebrar? y el profe,
no sé si ya sabía que había garrochas de aluminio, fue y la vio y le pregunta
al juez, ¿estas son las nuevas garrochas? Y le dice el juez que sí y me dice el
profe, pues esas son las nuevas garrochas y se fue a seguir haciendo sus tiros
de calentamiento; put.... mad.... yo volteaba para todos lados, buscado una
explicación, jajaja, y al no encontrarla, le digo al juez: que me diera
oportunidad de hacer varios brincos de calentamiento y me preguntó que sí por
qué y le dije inocentemente: es que nunca e brincado con una garrocha de
aluminio, y me pregunta? y ¿con qué brincabas? Con una de bambú; con una de
bambú? siii con una de bambú y puso una cara de será cierto? o me está
cuentiando? hasta eso que se portó bien y me dijo, está bien, haz 6
brincos de calentamiento, normalmente dan 3 brincos; la verdad, yo si estaba
desconfiado, pero al tercer brinco la domine con facilidad.
Acababa de
brincar 2.50, cuando me llaman a correr la final de los 100 metros y le pido
autorización al juez, para ir a correr y terminando, seguiría brincando y si me
autorizó; que por cierto dicha final, levantó muchas expectativas, porque el
corredor de La Paz y que era de la secundaria Morelos, había hecho un segundo
menos que yo, en su pit eliminatorio; en aquellos entonces, había una férrea
rivalidad deportiva, entre San José del Cabo y La Paz; el INJUVE estaba a
reventar y después supe que se habían hecho apuestas; unos a favor y otros en
contra; los que han competido en una prueba o varias pruebas, no me dejarán
mentir; es tanta la concentración, que no escuchas los gritos y las porras;
después me dijo la palomilla que era un griterío ensordecedor y todo el
desmadre que había, antes y durante la carrera; nos llaman a todos los
finalistas a la línea de salida y me pregunta el juez, que por cierto le decían
"El Cuacha", que si donde había dejado mis spikes y le dije que yo
corría descalzo ( la escuela de mi admirado"Forey") y no me
creyó y fue con el profe Fernandito que si era cierto que yo corría descalzo y
el profe le dijo siiii (el profe sabía perfectamente que así corría, porque una
vez que estábamos entrenando en la calle grande, me dijo emocionado! mira los
Spikes que te encargamos para que corras, con estos vas a volar; me los puse y
a media carrera, por poco y me voy de narices, me fui tirando agarrones al aire
como unos 30 metros; allí mismo me senté y me los quite y le dije gracias
profe, pero prefiero seguir corriendo descalzo, como siempre lo he hecho)
recuerdo que el juez, que por cierto era de La Paz, se me quedó viendo y nos
dijo, si alguien sale en falso, lo voy a poner 10 metros de la línea de salida
o puedo descalificarlo; eso me distrajo y para acabarla, me va tocando el
corredor de La Paz, a mi lado derecho; en sus marcas, listos, fuera:
......... mañana prosigo 🙏🙏